“Mallorca es un lugar parecido a la felicidad”, escribió Jorge Luis Borges, y pocos destinos reflejan mejor ese sentimiento. Con más de 550 kilómetros de costa, la isla ofrece más de 300 playas y calas, cada una con su propio carácter. Algunas son ideales para familias, otras atraen a nadadores, navegantes o a quienes buscan tranquilidad. Entre acantilados cubiertos de pinos y aguas turquesa, Mallorca ha perfeccionado el arte de la vida junto al mar.
Esta selección curada reúne las mejores playas de Mallorca, donde la belleza natural, la comodidad y la elegancia mediterránea se combinan de forma impecable.
Las mejores playas de arena blanca en Mallorca
Cala Mesquida
Reconocida como Área Natural de Especial Interés desde 1991, Cala Mesquida destaca por su arena blanca y fina, su entorno de pinares y el extenso sistema dunar de es Munt Gros, hogar de una de las mayores colonias de aves marinas de Baleares. A pesar de su belleza virgen, la playa cuenta con socorristas, sombrillas y un chiringuito durante el verano.
Muy cerca, Villa Sa Font ofrece vistas a Cala Provençals y una estancia tranquila y privada cerca de la costa. Rodeada de pinos y con vistas al mar, es una base cómoda para explorar el apacible noreste de Mallorca.
Los visitantes pueden practicar esnórquel entre las zonas rocosas, montar a caballo con Ranch Cala Mesquida o recorrer los senderos panorámicos que conducen a Cala Torta y Talaia de Son Jaumell.
Es Trenc
Entre las playas más exclusivas de Mallorca, Es Trenc destaca por su arena blanca, sus aguas turquesa poco profundas y su entorno natural intacto. Limita con los humedales del Salobrar de Campos, una reserva protegida de 1,500 hectáreas donde flamencos y garzas habitan alrededor de las históricas salinas de Salinas d’Es Trenc.
Aquí se puede nadar o hacer esnórquel en aguas tranquilas y cristalinas, y luego unirse a una visita guiada por las Salinas d’Es Trenc para conocer el tradicional proceso de recolección de la Flor de Sal.
Especialmente agradable en temporada media, Es Trenc ofrece tranquilidad, amplitud y la belleza natural que define el encanto costero de Mallorca.
Las mejores calas de Mallorca
Cala Varques
Ubicada entre Porto Cristo y Cales de Mallorca, Cala Varques es una de las calas escondidas más impresionantes de la isla. Se encuentra al pie de acantilados de piedra caliza y laderas cubiertas de pinos, ofreciendo un entorno natural y salvaje. Sus aguas turquesa invitan a nadar, practicar esnórquel o lanzarse desde las rocas, mientras que las cuevas marinas cercanas, como la famosa Cueva del Pirata y la Cova des Coloms, se pueden explorar nadando o en kayak.
Hay que tener en cuenta que el acceso requiere una caminata de unos 20 minutos desde el camino de tierra que parte de la carretera Ma-4014, por lo que conviene llevar agua, algo de comida y calzado cómodo.
Caló des Moro
Enmarcada por empinados acantilados de piedra caliza, Caló des Moro es una de las calas más fotografiadas de la costa sureste de Mallorca. La playa, de unos 40 metros de longitud, ofrece arena blanca y fina, y aguas turquesa poco profundas ideales para nadar. Según la información oficial, se encuentra en un terreno privado gestionado por la Fundació Amics d’Es Caló des Moro – S’Almonia, que protege su frágil ecosistema.
Llegar a la cala requiere una caminata corta pero empinada de unos 15 a 20 minutos desde el aparcamiento de Cala Llombards. Vale la pena salir temprano, cuando el aire aún es fresco y la playa conserva su calma.
Las mejores playas cerca de Palma de Mallorca
Cala del Mago / Playa El Mago
A pocos minutos en coche desde Palma, Cala del Mago es una cala resguardada rodeada de acantilados y pinares. Sus aguas tranquilas y transparentes, junto con su arena fina, la convierten en una de las playas más apacibles de Mallorca. Oficialmente designada como playa naturista, es conocida por su ambiente relajado y su fondo marino poco profundo, ideal para nadar y practicar esnórquel. La playa ganó fama tras aparecer en la película The Magus (1967), protagonizada por Anthony Quinn y Michael Caine.
Aquí puedes hacer esnórquel en aguas cristalinas, caminar por la costa hasta Cala Portals Vells o disfrutar de mariscos frescos y bebidas frías en Bar Playa del Mago, el restaurante informal junto a la arena.
En Port Andratx, Villa Brisa ofrece un refugio tranquilo en la zona de La Mola, con vistas panorámicas al mar y acceso a senderos costeros. Sus terrazas abiertas y la cercanía al puerto, con sus cafés y boutiques, la convierten en una base cómoda para explorar la costa suroeste de Mallorca.
Camp de Mar
Camp de Mar es el tipo de playa que invita a bajar el ritmo. Con arena suave y aguas tranquilas y claras, es perfecta para nadar largas distancias o pasar una tarde sin prisa. Los acantilados de piedra caliza que rodean la bahía la protegen del viento, creando un ambiente sereno que atrae tanto a familias como a parejas. Tumbonas, sombrillas y bares de playa hacen que sea fácil pasar el día entero con comodidad.
Cuando llega el momento de comer, puedes cruzar el puente de madera hasta el Restaurante Illeta, un local muy querido situado en un pequeño islote frente a la orilla. Famoso por su marisco fresco, su vino blanco bien frío y sus vistas panorámicas al mar, es el cierre perfecto para un día al sol. Para cambiar de ritmo, se puede subir hasta la Torre de Cap Andritxol, una torre de vigilancia del siglo XVI con vistas a la costa de Andratx. Con aguas tranquilas, todos los servicios y un encanto atemporal, Camp de Mar encarna el espíritu relajado del Mediterráneo.
Playas ideales para familias
Cala Agulla
Si planeas unas vacaciones en familia, Mallorca es conocida por sus playas tranquilas y de aguas poco profundas, y Cala Agulla es una de las favoritas. Ubicada al norte de Cala Ratjada, en la costa noreste de la isla, está rodeada por dunas y pinares. Declarada zona protegida en 1991, contribuye a preservar la vegetación autóctona y la vida marina dentro de una amplia reserva costera. Con servicio de socorristas, duchas, tumbonas y pequeños chiringuitos, ofrece un entorno cómodo y seguro para pasar un día relajado junto al mar.
Además, los más activos pueden alquilar kayaks o tablas de paddle surf para explorar calas cercanas como Cala Moltó y Cala Mesquida. También hay paseos en barco organizados por operadores locales, una forma ideal de admirar la costa y disfrutar de las aguas turquesa. Detrás de la playa, el pinar ofrece senderos sombreados y zonas de picnic, perfectas para escapar del calor del mediodía. Y cuando llega el momento de descansar, Sa Cova Bar sirve bebidas frías y comidas ligeras con amplias vistas al mar.
Platja de Muro
A lo largo de la bahía de Alcúdia, Platja de Muro es uno de los destinos costeros más exclusivos de Mallorca. Posee el distintivo de Bandera Azul por la calidad de sus aguas y su seguridad, y está dividida en cuatro secciones que van desde zonas animadas con servicios hasta áreas más tranquilas entre las dunas del parque natural Es Comú. Sus aguas poco profundas y arena blanca y suave la hacen perfecta para familias con niños y para practicar paddle surf.
Para una estancia privilegiada, Villa La Playa ofrece acceso directo a la playa, terrazas privadas y vistas ininterrumpidas al Mediterráneo. Después de nadar, nada mejor que disfrutar de un almuerzo gourmet en Royal Beach Gastrosenses, reconocido por su cocina mediterránea contemporánea y su ambiente frente al mar.
Playas con privacidad y paisajes únicos
Si buscas lugares más serenos donde disfrutar del mar en calma, estas calas son imprescindibles.
Torrent de Pareis
Declarado Monumento Natural en 2003, Torrent de Pareis es una de las formaciones geológicas más impresionantes de Mallorca. Este desfiladero de tres kilómetros atraviesa la Sierra de Tramuntana, con acantilados de piedra caliza que se elevan hasta 300 metros antes de abrirse a una pequeña playa de guijarros. El cañón se forma donde confluyen los torrentes de Lluc y Gorg Blau, creando un anfiteatro natural de gran belleza.
Llegar en coche implica recorrer la famosa carretera del “Nudo de la Corbata”, una serie de curvas diseñadas en los años 30 que serpentean entre las montañas. Por otro lado, los más aventureros pueden optar por hacer la ruta de senderismo a través del desfiladero, una travesía exigente de seis horas que recompensa con vistas espectaculares.
Quienes prefieren un plan más relajado suelen llegar en barco desde Port de Sóller, un recorrido que permite admirar de cerca la magnitud de los acantilados al encontrarse con el mar. Muy cerca, la Villa Es Codol, en Deià, ofrece un refugio elegante con vistas al mar y a la montaña, perfecta para disfrutar de la tranquilidad y los paisajes más imponentes de Mallorca.
Llucalcari
Escondida entre antiguas terrazas de olivos, Llucalcari es una pequeña cala de unos 50 metros, de aguas transparentes y ambiente silencioso. Un manantial de agua dulce desemboca en el mar, creando depósitos de arcilla que tanto locales como visitantes usan para baños de barro naturales. El fondo marino, con rocas y praderas de posidonia, la convierte en un lugar ideal para hacer esnórquel en días tranquilos.
El acceso es corto pero empinado: un sendero de unos 300 metros entre pinos y olivos que recompensa con vistas al mar y una sensación total de calma. Después de nadar, vale la pena acercarse a Ca’s Patró March, en la cercana Cala Deià, para disfrutar de mariscos frescos y un almuerzo relajado frente a la costa.
Descubre la costa de Mallorca con estilo
La costa de Mallorca es una de las más diversas y exclusivas del Mediterráneo. Su atractivo reside en la variedad: calas tranquilas, playas familiares y zonas ideales para hacer esnórquel, todas cerca de encantadores pueblos costeros. Para quienes buscan privacidad y confort, alojarse en una villa frente al mar es la mejor forma de disfrutar la belleza de la isla. Cada propiedad combina el diseño contemporáneo con el entorno natural, creando una conexión perfecta con el mar. Si quieres descubrir dónde hospedarte cerca de las mejores playas de Mallorca, explora nuestra colección curada de villas y encuentra el lugar perfecto para vivir la isla con elegancia, calma y vistas al mar.
